LímiT-21 le cogió el gusto al “merenguetón”

No es la primera vez que la orquesta LímiT-21 se mezcla con el reguetón. De hecho, según el integrante Javier, desde principios de los años 90, están coqueteando con el moderno ritmo. Su primer tema tipo “merenguetón”, como llaman a la fusión de merengue y reguetón, se llamó Prenda querida.
Pero es ahora cuando presentan la que creen es su decimosexta producción discográfica Adictivo, que la presencia urbana se hace sentir con las colaboraciones de los duetos Ñejo & Dálmata y Alexis & Fido en el primer sencillo, Si tú no estás. También figuran en los créditos el reguetonero Don Omar con el tema Maldito email y Nesty “La Mente Maestra”, como coproductor en los temas urbanos.
“Desde la arrancada estamos coqueteando con la música urbana, porque nosotros crecimos con eso en los (años) 80”, establece Ramiro.
“Siempre hemos estado abiertos a la evolución. LímiT-21 ha sido un grupo que siempre ha estado a la vanguardia de lo que está sucediendo. Nunca hemos estado cerrados a evolucionar, sin perder la esencia de lo que es LímiT-21”, agrega Javier, quien junto con sus compañeros ultiman los detalles del lanzamiento del disco el próximo 17 de noviembre.
Tales remixes o mezclas rítmicas, admiten, les han dado acceso al público joven que lo aplaudió con temas como Baile pegao y A la nena le gusta el tra.
“Con todos los artistas tenemos una comunicación a nivel de amigos, aparte de colaborar en la producción, esto fue como una reunión de amigos... Ha sido un party, ha sido una reunión de amigos y eso es lo que la gente va a escuchar”, asegura Ramiro.

El repertorio se completa con “merengues calle” como Eso es mío, Party y Déjate de aguaje, cuyo sabor musical lo comparan con sus éxitos Estás enamorada y Como tú me quiere' a mí. En estas canciones colaboran Luis Rosario y Los Hermanos Rosario en la percusión, grabada en el estudio del arreglista Manuel Tejada en la República Dominicana.
De línea romántica es el corte Una despedida, que tendrá versiones en merengue y vallenato pop; mientras que de tono social es la composición Un angelito, que aborda el maltrato de menores.

LímiT-21 quiere llamar la atención el título escogido para este álbum: Adictivo.
De acuerdo con la explicación de Ramiro, el objetivo colectivo es darle un matiz positivo a la palabra adicción que, mayormente, tiene connotaciones negativas.
“Estamos adictivos ahora, pero a vivir la vida positivamente, a la fiesta, a la música y al baile, pero todo eso con un enfoque positivo”, detalla Ramiro, quien atribuye esta visión optimista de la existencia a lo que, tanto él como sus compañeros, experimentaron en un retiro de Papa Juan XXIII.
La transformación espiritual, dicen, se reflejará en las tarimas.
“Van a ver la madurez y el crecimiento artístico, la experiencia que hemos ido adquiriendo, de cómo presentar en la tarima lo que grabaste en estudio... Y una paz espiritual que sobrepasa lo anterior”, precisa Javier.
“Van a ver un LímiT-21 bien moderno, sin perder la esencia”, anota.
La orquesta, con casi 20 años de formación, toma como una “bendición” que sus contrataciones se mantengan en ritmo ascendente a pesar de la estrechez económica global.
“El público ha sido demasiado grande con nosotros, LímiT-21 sigue trabajando; tenemos esa bendición del Señor; estamos aquí y nos siguen contratando”, agradece Elvin al tiempo que comenta que la orquesta tiene todo el mes de diciembre comprometido.
Entre sus próximas presentaciones mencionan el encendido de la Navidad del pueblo de Guaynabo y un concierto en el House of Blues en Orlando el 26 de diciembre.